Días tan malos como el de hoy... hacía mucho que no tenía.
Ha empezado muy mal, y ha seguido peor. Y acabo de explotar. Con una sola canción con la que en realidad no me siento identificada pero que me ha hecho explotar. Y estoy llorando y la verdad es que me sienta bien, por todas esas veces que no he llorado, por todas esas veces que me he aguantado y he seguido fuera como fuese.
Por todas esas palabras que me han dolido y he perdonado, por todas las veces que me he equivocado y he pedido perdón. Por todas las veces que he hecho daño y aún siguen perjudicando a alguien.
Por todas las cosas que he mejorado, que he ganado.
Por todas las veces que he hecho algo bien, que me he superado a mi misma. Por todas las veces que he hecho algo que no me creía capaz de hacer.
Por lo buena que soy, y lo mala. Por ser yo
Porque se puede llorar de tristeza, de extenuación, de impotencia, de rabia... pero también de alegría, de alivio, de felicidad.
Y de todo a la vez.
Yo no soy de mitades, yo soy de todo.
Y me supero a mi misma una y otra vez, y cada vez me afectan menos los juicios de quien no soy yo. A veces siguen doliendo, pero por la persona de la que vienen, a veces alguien en quien querías confiar te demuestra que no es posible por muchos intentos que hagas. A veces.
Pero lo mejor de hoy es que he aprendido a seguir sola, a reponerme sola, a no dejar que me afecte lo que no quiero que me afecte.
Y este fin de semana... se que voy a ser feliz.
Os dejo la canción que me ha hecho explotar
Tu boca es el portal donde quiero dormirme.
Tu ropa mi peor enemiga.
Imagina que te beso y no te giras.
Bailo contigo en la distancia, supongo tu calor.
Supongo estás cansada, amor.
Y duermo con una foto tuya y ahí no dices que no.
Ahí dices 'cántame' y te hice esta canción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario