Aviso a navegantes

Soy responsable de lo que escribo, no de lo que usted entienda o interprete

sábado, 19 de agosto de 2017

Expectativas

Hoy me he despertado entre pensativa, triste y decepcionada.
Siempre me pasa lo mismo, eso de querer a los demás de una manera que no es recíproca, o de poner un interés en ellos que no me devuelven. Me he parado a pensar en todas las personas a las que quiero (ajenas a mi familia) y que me quieren de la misma forma que yo a ellas, o que me devuelven el mismo interés que les doy. Me he quedado con tres, ampliable a cinco según otro tipo de criterio. Y al pensar en ello me he sentido... feliz. Porque esas tres (o cinco) personas merecen tanto la pena que no necesito a nadie más.

Eso no quita que los demás me decepcionen. Me engancho rápido a las personas, a todos los quiero pronto y todos me parecen maravillosos casi desde el principio, por eso las decepciones son algo normal en mi vida y que me busco yo misma al idealizar a la gente. De hecho creo que me decepcionan porque es imposible llegar a las expectativas que yo misma pongo en ellos, no porque ellos no valgan la pena.
Lo bueno de tener las expectativas en ese nivel es que quien llega... puf, llega de verdad, y me llena de total felicidad el tiempo que esté a mi lado. Aunque sepa que ese tiempo no será eterno.

Lo bueno es que sigo viendo lo positivo en lo negativo, y que aunque me haya despertado de esa manera extraña, el día ha ido tornándose de nuevo a la normalidad. Después de estar con Rocio y Almu, de hablar con K... estoy con una sonrisa de oreja a oreja, de esas que te hacen saber que vas a soñar cosas bonitas y que mañana me levantaré de buen humor.

Incluso pese a que me hayan vuelto a bloquear en whatsapp, pese a que siga echando de menos a personas que se fueron, pese a que personas que están no me quieran como yo las quiero a ellas.


¡Buenas noches!



Te quiero

No hay comentarios:

Publicar un comentario