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domingo, 10 de julio de 2016

Intereses fingidos

Desde hace ya años pienso que no sirvo como pareja, que no estoy hecha para ser novia de nadie, que no soy buena en ello.
Y ahora que llevo ya cerca de un año soltera y veo las cosas desde otra perspectiva... empiezo a pensar que estaba equivocada.
Realmente es que en estos últimos dos meses todas mis ideas y mi mentalidad han cambiado tanto respecto a las relaciones que me asombra. La base sigue estando ahí, sigo pensando que son una complicación, que todas acaban, que no existe el amor eterno y que no quiero enamorarme, ni tener novio. Pero sí ha cambiado mi forma de pensar a la hora de llevarlas, de empezar, seguir o terminar algo con alguien.

Llevo tanto tiempo centrándome solo en mis cosas malas, que estaba olvidando las buenas, y lo cierto es que gracias al hecho de que él no quiera tener nada conmigo, he empezado a recordarlas. 
Porque te paras a pensar ¿qué tengo de malo? y te das cuenta de que no eres tu, si no que simplemente no puedes gustarle a todos, pero aún así empiezas a darle vueltas a todas esas cosas buenas que han hecho que otras personas llegaran a enamorarse de ti, que te dieran parte de su vida, igual que tu se la diste a ellos.
Tengo muchísimas cosas buenas, muchas. Mi último novio llegó a decirme que nadie le había tratado como yo, no es el primero que lo ha hecho, y sé que no mentían. Lo se porque en las relaciones lo doy todo, todo. Quizás por eso siempre acabo tan destrozada, porque me entrego tanto que cuando no me lo devuelven me quedo vacía. Podría decir que no volveré a hacerlo, que intentaré medirme, pero se que no lo haré. Soy así, y me gusta, porque me gusta ser capaz de decir con la cabeza bien alta que yo lo di todo, que estaba dispuesta a darlo todo.
Tras reflexionar bastante he llegado a la conclusión de que como pareja, al final mis cosas buenas compensan las malas (que también son muchas) aunque es cierto que eso depende de la otra persona y de sus criterios, obviamente. Pero de cara a mi misma creo que merezco la pena.

Parece que me estoy vendiendo, pero en realidad no es eso, en realidad es que llevo tanto tiempo infravalorandome que ya no recordaba lo que era hacer lo contrario, y creo que es hora de cambiarlo.
Creo que mi último novio hubiera agradecido que lo hiciera antes... :P


Por otra parte, si es cierto que no me vuelco en quien no se vuelca en mi, en quien muestra interés solo a veces, según como le de el viento ese día. Yo te doy lo que soy, si no lo quieres no seguiré haciéndolo, porque no se darme a trozos, a intervalos, y me frustra ver hasta que punto puede llegar a desequilibrarse una balanza, por eso paro antes de hacerme daño.


"Vas a saber lo que has perdido cuando sea tarde, porque cuando lo tuviste no lo valoraste"

A veces, solo a veces, le echo demasiado de menos... "La ciudad del viento"

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