Aviso a navegantes

Soy responsable de lo que escribo, no de lo que usted entienda o interprete

miércoles, 26 de octubre de 2011

Mi padre

Yo tenia una hucha de hojalata, de las que solo se abren con un abrelatas. La tenía desde muy pequeña, y siempre que mi abuela me daba dinero, siempre que me podía quedar con la vuelta del pan, o siempre que tenia alguna peseta, la echaba en esa hucha. Era una hucha de las grandes, y conforme pasaron los años se fue llenando y pesando cada vez mas, hasta que  se llenó. Entonces mi madre me dijo que esperara para abrirla.
Cuando llegó el cambio al euro, fuimos a abrirla para que tuviera mis ahorros, ahorros que llevaban ahí años, que seguramente no sería mucho, pero era todo el dinero que había tenido en mis manos hasta ese momento. Estaba tan ilusionada, y tenia tantas ganas de ver ese dinero... Cuando la abrimos estaba vacía, quedaban dos pesetas sueltas rodando por la hucha. Nos fijamos en la ranura y vimos que estaba forzada y mas ancha. Mi padre la había forzado, y me había quitado todos mis ahorros para gastarlos en las maquinas del bar y en alcohol. Puede que parezca una tontería, pero recuerdo mi llanto, mi decepción, el dolor de ver esa hucha vacía, y el saber que había sido mi padre.


También, cuando yo tenía unos seis años, mis padres estaban discutiendo en su habitación. Mi hermana me tenia agarrada en el salón para que no fuera hasta allí, pero conseguí escaparme y fui hasta su habitación, abrí la puerta de golpe y llegué a tiempo para escuchar como mi madre le decía a mi padre "eres un cerdo" entonces, mi padre me miró, de pronto puso cara de pena, casi se echó a llorar, y me dijo "¿Has visto lo que me dice tu madre? Me ha llamado animal" Y yo miré a mi madre y le dije "Te odio" y salí corriendo. Se que era una niña, que no sabía lo que hacía, pero mi padre si sabía lo que hacía, el no era un niño, y sabía como reaccionaría yo. Siempre que lo recuerdo me duele el pensar cuanto daño tuve que hacerle a mi madre, todo porque mi padre me usó en su beneficio.


Otra vez, años mas tarde, cuando mis padres ya no estaban juntos y yo tendría unos 11 o 12 años, mi primo vino a Sevilla y fuimos a pasar un día con mi padre, que quería vernos. Todo fue bien hasta que, porque le dio la gana, comenzó a hablar mal de mi abuelo materno, a insultarlo y decir que era una mala persona. Yo adoraba a mi abuelo, me quería muchísimo, y me lo demostraba cada día. Mi padre me hizo mucho daño al decirme las cosas que me dijo, y discutí con el. Al final, acabamos llorando mi primo y yo. Y mi padre me decía que ya era hora de que fuese mayor y aceptara las cosas tal y como eran, y que mi abuelo era una mala persona.
Por favor, recordad la edad que tenía, recordad que mi padre era una adulto, y que mi abuelo me había criado y era para mi casi como un padre.


Mi padre... esa persona que a todo el mundo cae bien, al que todos adoran. El alma de la fiesta, el cocinero por excelencia, el que ayuda, el que apoya, en el que puedes confiar...


Ese hombre que todos creen conocer, pero que realmente no existe. Todo lo que conoce de ti lo usará en tu contra, para controlarte, para tenerte a su merced. Te hará depender de él, te hará creer que sin él no eres nada. Y te dejará hundida, vacía, rota... cuando decida que se ha cansado de ti, o cuando tu te reveles sin darte cuenta aunque sea solo un poco.


Mi padre sería un hombre maravilloso si quisiera. Pero no quiere, porque a él solo le importa su felicidad, solo le importa su bienestar.
Dice que ha cambiado, que ya no es así. Pero no tiene remedio.
Incluso cuando mi hermana y yo le dimos una ultima oportunidad, quiso jugar con nosotras, nos mintió, tergiversaba nuestras palabras y jugó con nuestros sentimientos una vez mas.
Amenazó con suicidarse, para darnos pena, llantos, mensajes tristes... todo un sinfín de cosas para hacernos sentir mal y volver con él. Me hizo mucho daño, lo pasé realmente mal cuando pensé que podía quitarse la vida. Pero eso a el no le importa, solo le importa él mismo y ahora me doy cuenta de que nunca le importará nadie mas.


El dirá que es inocente, que jamás hizo nada de esto. Pero yo sé la verdad. Sé que era mi héroe, que le quería de una forma increíble, y que él prefirió renunciar a nuestro amor para vivir mejor, y tener una felicidad ficticia que nunca le llevará a nada.


Puede que escribir esto no sea lo mas correcto. Puede que me arrepienta de hacerlo.
Pero son mis recuerdos, es lo que siento, es mi dolor...
El dolor de saber que tuve un padre excelente que me dio una vida maravillosa y que cambió para convertirse en un monstruo que ha conseguido que mi vida sea mucho mas triste, mas oscura. Y que desee que él nunca hubiera existido.


Perdonadme por esta entrada, por esta tristeza. Pero hay días que me acuerdo de él, y me duele tanto que siento que explotaré si no vomito mis pensamientos de alguna forma.
Hoy a tocado que sea a través de este blog, quizá otro día solo meta un grito que se oiga hasta en la luna.


Un día, exploté escribiendo esta canción



1 comentario: